martes, 6 de marzo de 2018

Houston Museum of Natural Science

Lucy

2 comentarios:

  1. Hace cuarenta años, una mañana de domingo a fines de noviembre de 1974, un equipo de investigadores estaba excavando un sitio remoto de la región de Afar, en Etiopía.

    Durante un reconocimiento del área, el paleoantropólogo Donald Johanson descubrió un pequeño trozo del hueso de un codo.

    Inmediatamente se dio cuenta de que era un ancestro humano. Y encontró muchos restos más.

    "Cuando miré hacia mi izquierda vi pedacitos de un cráneo, un trozo de mandíbula y un par de vértebras", dice Johanson.

    Era evidente que el hallazgo del esqueleto representaba un hito: los sedimentos de la zona tenían 3,2 millones de años de antigüedad.(...)

    www.bbc.com

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  2. La ciencia lo afirma: todos nosotros, hasta los más racistas, descendemos de africanos.
    Más concretamente, de una sola mujer negra que habitó las sabanas africanas hace unos 150.000 años.
    Con justa razón, los científicos la han bautizado como ‘la Eva negra’. A pesar de que durante milenios todas las culturas humanas han fantaseado con orígenes de la especie humana tan disparatados como la bíblica leyenda de Adán y Eva, estudios recientes, como el llevado a cabo en 1986 por Cann, Stoneking y Wilson, de la Universidad de California, en Berkeley, han aclarado el misterio definitivamente.

    Confirmado más tarde por genetistas de la Universidad de Oxford como Bryan Sykes y Richard Dawkins, la verdadera historia de nuestro linaje se ha develado: comenzó en África.
    Y durante cientos de miles de años, permaneció allí.

    Al decir de Dawkins: “Tenemos a África en nuestra sangre y África tiene nuestros huesos. Todos somos africanos. Este solo hecho hace del ecosistema de África un objeto de singular fascinación. Se trata de la comunidad que nos moldeó, la comunidad de animales y plantas en la que realizamos nuestro aprendizaje ecológico”.

    La clave para la resolución de este enigma ha sido la lectura del ADN mitocondrial, que se transmite únicamente por vía matrilineal, es decir, de madre a hija.
    Todos los linajes mitocondriales confluyen hasta terminar en una sola madre, una sola mujer, la verdadera Eva de la humanidad de la que descendemos todos los seres humanos.
    Esta mujer vivió en una fecha aproximada de entre 100.000 y 200.000 años atrás, y era una negra bosquimanade África Central.

    Más tarde, en busca de caza abundante, los descendientes de Eva iniciaron la larga marcha hacia las fuentes del alimento que comenzó con el nomadismo de pequeños grupos tribales.
    Lo que se convirtió en las masivas migraciones humanas que todavía hoy se desencadenan a partir del hambre, las guerras, las pestes y el cambio climático.

    A pie, con seguridad acarreando en hombros a los más débiles, nuestros antepasados cruzaron desde el Cuerno de África por un istmo en el estrecho Bab el-Mandeb hasta el actual Yemen.

    En una etapa posterior rodearon la cuenca mediterránea hasta alcanzar la región balcánica y de allí se desparramaron para poblar Asia y Europa.(...) historiadeafrica.com

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