Cagnacci toma su lugar junto a Carvaggio en la historia con nuevo espectáculo

El pintor pícaro era considerado un talento regional hasta hace poco

Por  • 25/11/16 09 a.m.
Guido Cagnacci de los arrepentidos Magdalena.
Guido Cagnacci de los arrepentidos Magdalena . Cortesía de la Fundación de Arte Norton Simon
El Arrepentido Magdalena es una escena sensual de la conversión religiosa. Hacia la parte inferior de su gran trama es un rastro de joyas en oro y vestiduras resplandecientes, lo que lleva a una mujer de rostro fresco joven en el suelo, apenas cubierto con tela fina, y confortado (y regañado) por una figura femenina vestida completamente. Por encima de ellos, un ángel en el centro de la tela conduce un diablo de distancia.
El título del cuadro explica lo que está pasando. Es la escena del arrepentimiento de la cortesana que por lo general se representa manteniendo vigilia en la tumba de Jesús con un frasco de perfume que ella puso en pie.
Aquí estamos en el punto en la leyenda de la cortesana en la que rechaza una vida de pecado. Su hermana, totalmente vestida Martha, está allí para guiarla por el camino de la virtud.
La pintura es de Guido Cagnacci (1601-1663). Cagnacci, hasta la Segunda Guerra Mundial, fue visto como un pintor regional en un siglo de grandes artistas como Caravaggio y Correggio.
Ahora al menos una autoridad está llamando de Cagnacci El Arrepentido Magdalena la mayor pintura italiana de los 17 º siglo. El Museo Metropolitano de Arte solo exhibió su recién adquirida La muerte de Cleopatra (1645), uno de una serie de visiones seductoras de Cagnacci del suicidio (martirio?) De la reina egipcia. La próxima semana, el Instituto Italiano de Cultura está trayendo muerte de Cleopatra(1660-1663) por Cagnacci a Nueva York-éste de la Pinacoteca di Brera en Milán.
El Arrepentido Magdalena es cedida por el Museo Norton Simon de Pasadena, California. Cuando Simón, un magnate de las fusiones y adquisiciones, compró el cuadro en 1982, y lo exhibió en su museo fuera de Los Ángeles, los especialistas notaron, pero algunos otros hicieron.
Pero ¿por qué ahora? Nadie está alegando cualquier tipo de Cagnacci conspiración.Es más que nada una coincidencia. El Met encontró el Cagnacci que quería y lo compró a principios de este año. El Instituto Italiano de Cultura organiza una sola pintura de mostrar todos los años. El préstamo de Italia ha sido en las obras durante un tiempo.
Lo que no es coincidencia es el creciente reconocimiento por el pintor que se celebró en su Rimini natal (también el lugar de nacimiento de Federico Fellini), pero apenas en cualquier otro lugar. Sus imágenes suelen ser una mezcla armoniosa y, a veces las sacudidas de la devoción y la seducción, con una sensación única para los tonos de la piel y las expresiones de éxtasis. El hecho de que la cifra que expresa el éxtasis llevaba un hábito de monja no lo detuvo. La vida de Cagnacci, reconstruido a partir de los parches de pruebas, fue, como un historiador del arte italiano puso, "inquieto y disoluta, ingobernable e incluso inconexo."
Ahora que Cagnacci está en la pared, que vale la pena saber quién era. Una nueva fuente de entretenimiento es el arte de Guido Cagnacci , por el comisario de la Frick, Xavier Salomón.
Nacido en Santarcangelo di Romagna, cerca de Rimini (el lugar de nacimiento de Federico Fellini), Gudio Cagnacci era el hijo de un pregonero y peletería. Su familia tenía suficiente dinero y el joven tenía el talento suficiente para él para estudiar en Bolonia, y luego de pasar dos años en el estudio del maestro romano Guercino. Un alumno-obediente que no sabe mucho más acerca de sus primeros años 20-Cagnacci encontró el tiempo para la aventura cuando volvió a Rimini. Se involucró con Teodora Stivivi, una joven viuda de una familia prominente que obtuvo el control de la fortuna de su marido mayores a una edad temprana y se fugó con Cagnacci. La pareja huyó con su hija y servidora. Teodora vestido de rojo, como un niño.Interfiriendo con las líneas de la nobleza y la riqueza heredada poner en riesgo Cagnacci, y su padre regaló el escondite de su hijo. Esta traición puede haber salvado la vida del joven.
Más tarde Cagnacci encontraría otra compañera para firmar por encima de su riqueza para él. Dejaría Rimini (no estamos seguros de por qué) y vivir en Venecia con un nombre falso, con el tiempo se mueve a Viena para trabajar bajo el patrocinio del emperador Leopoldo I. Pintó El Arrepentido Magdalena en Viena entre 1660 y 1663, y allí murió en 1663. Su padre ya le había desheredado. Las únicas cartas que tenemos de Cagnacci son obscenas diatribas contra otros pintores.
No es de sorprender, entonces, que el artista podría convertir la modestia en la seducción, a pesar de que sus clientes tendían a ser las iglesias o las órdenes religiosas. En un retablo para una iglesia en Rimini, que representa el recién canonizada Santa Teresa de Ávila atravesado por una flecha en poder de un ángel. La cara de la carmelita es una visión de éxtasis sereno.
En el Met de Cleopatra , la reina egipcia, con una serpiente venenosa en su mano, tira hacia abajo su camisa con la otra mano para exponer su pecho. Es una exaltación de la carne que está a punto de morir.
Cleopatra muriendo de Milán, que pronto será mostrado en el Instituto Italiano de Cultura en Park Avenue, presenta un post-mortem serenidad tan puro. Usted tiene que buscar mucho para encontrar la serpiente que terminó con su vida.
El Arrepentido Magdalena (detalle).
El Arrepentido Magdalena (detalle). Cortesía de la Fundación Norton Simon arte y la Colección Frick
En El Arrepentido Magdalena en la Frick, María Magdalena ha desechado la gala de su antigua vocación. Junto con las joyas (que condujo, más tarde, a las comparaciones con Vermeer) hay un par de zapatos de color azul exquisita en el primer plano. Su rechazo a la parafernalia de una prostituta fue visto por la iglesia como la aceptación de la piedad. Los espectadores en la corte imperial de Viena pueden haber tenido otros pensamientos. La expresión de desconcierto de la Magdalena se vuelve tan moderna que el adjetivo ni idea viene a la mente. (Cagnacci también pintó escenas de la Magdalena están llevando al cielo por un ángel, cubierto discretamente por sus largas trenzas.)
En 1982, Norton Simon compró El Arrepentido Magdalena de $ 525.000 de la galería de arte Colnaghi, que pagó $ 400,000 para que en Londres de Christie en el año anterior. El Museo del Louvre lo hubiera querido, pero no podía competir cuando el precio de la imagen se elevó muy por encima de la estimación de la casa de subastas de £ 25.000 a £ 35.000.
Fue un largo viaje desde la ciudad natal de Fellini a Hollywood. La pintura había permanecido en Pasadena hasta que el préstamo a la Frick. Cuando vuelve a principios del año siguiente, la autoestima y la notoriedad de Cagnacci podrían ser suficientes para merecer un guión. Hollywood ama devoción casi tanto como lo ama seducción.